Todo lo que necesitas saber sobre los frenos
Muchas cosas pueden cambiar, los autos pueden dejar de utilizar gasolina, dejar de lado las ruedas, evolucionar tanto como sea necesario según las necesidades de la sociedad, pero los frenos siempre van a estar ahí, pues responden a una necesidad básica.
Todo aquel que avanza, debe parar, así de simple.
Diferentes sistemas de frenos
La industria automotriz ha buscado siempre mantenerse a la vanguardia cuando se trata de innovar en materia de tecnología.
Los sistemas de frenos por supuesto no han sido la excepción, con los años, la tecnología integrada a estos ha ido en aumento.
Frenos como los de tambor aún pueden ser encontrados en vehículos actuales, una tecnología no muy eficiente en comparación a los frenos de disco, pero que hallamos algunos modelos en sus versiones menos equipadas.
Frenos de tambor
Este sistema consiste en una pieza circular, integrada al eje del automóvil, recibe el nombre de tambor, pues su forma es tal.
Dentro de esta encontramos dos zapatas que al ser accionado el freno se friccionan entre sí contra la superficie del tambor, provocando así la desaceleración del vehículo.
Una de las ventajas que ofrece este es su economía. Ya que se trata de un sistema de más antigüedad, los mantenimientos son mucho más baratos y también presentan un menor costo de fabricación.
Frenos de disco
El sistema de frenos de disco es en realidad una mejora respecto al sistema del tambor, pues la idea es bastante parecida, se trata de dos piezas creando fricción entre sí.
En este caso, tenemos una pinza que es accionada por un pistón, quien a su vez fricciona el disco, desacelerando la rueda.
Los frenos de disco por su diseño permiten que el calor generado se disipe de mejor manera que como lo hace en el caso de los frenos de tambor. Los frenos de disco también presentan más potencia a la hora de frenar.
Frenos ABS
Los frenos ABS, “Anti-lock Braking System”. Es un sistema de frenado integrado cuyo objetivo es variar la fuerza aplicada al momento de frenar, evitando así que las ruedas se bloqueen.
En ocasiones, cuando se tiene que frenar de forma repentina, es normal que al pisar el pedal del freno los neumáticos dejen de girar, provocando un derrape.
Los frenos ABS lo que hacen es que el frenado no resulte muy brusco, sino que sea suave la transición de desaceleración del vehículo y permiten mayor maniobrabilidad durante el frenado.
¿De qué se componen los frenos de disco de tu auto?
Los frenos de disco los podemos hallar en la mayoría de los vehículos hoy en día, es un sistema simple pero bastante eficiente.
Los frenos de disco constan de 4 componentes:
- Disco: Una pieza circular que gira junto con la rueda del vehículo.
- Pinza: Pieza que sirve como base de la pastilla de freno.
- Pistón: El pistón se ubica en la pinza, se trata de una pieza en su mayoría de acero, encargado de empujar las pastillas para que se efectúe la acción del freno.
- Pastillas: Son las piezas que están en contacto directo con el disco, realizando el frenado.
Estas cuatro piezas componen el sistema de los frenos de disco.
El líquido de frenos: el mejor aliado
Todo sistema de frenos, sea de tambor o de disco, depende del líquido de frenos.
Este líquido es el encargado de conectar el pedal con el sistema de frenos de nuestro vehículo.
Responde al principio de que los líquidos son incompresibles, por lo tanto, son ideales cuando se trata de ejercer presión sobre una determinada superficie, como es el caso del sistema de frenos de disco o de tambor.
Ya que todo este sistema suele trabajar a altas temperaturas, el líquido de frenos también cuenta con un punto de ebullición bastante elevado, por lo que es poco probable que este se disipe.
Mantener un buen nivel de líquido de frenos te permite tener la seguridad de que tu vehículo responderá siempre de la mejor manera a la hora de accionar el sistema de frenado.
Cómo comprobar el nivel de líquido de frenos
Revisar el nivel del líquido de frenos, es tan sencillo como revisar el nivel de aceite.
Debes ubicar el depósito del líquido de frenos en tu motor. Generalmente, viene indicado con el símbolo de frenos, similar a un hexágono o un círculo con líneas perpendiculares a su alrededor.
Una vez ubicado, basta con destaparlo y verificar el nivel dentro, si observas un buen nivel y el color es un tono amarillento un poco transparente, entonces está perfecto.
Si, por otro lado, notas que el nivel está bajo, deberás rellenarlo para ponerlo al nivel adecuado, pues de no ser así podría desencadenar en una serie de problemas mayores.
Si tu vehículo frena poco…
Es normal llegar al punto en el que nuestro auto ya no responde como antes al momento de frenar.
Al ser sistemas compuestos de materiales que están en constante fricción y desgaste, en cualquier momento va a ser preciso darles mantenimiento o, en su defecto, cambiarlos.
Si has llegado al punto en que detectas que tu vehículo frena menos o hay que pisar un poco más el pedal, puede ser por diversos factores.
- Falta de líquido de frenos: Como ya has visto, el líquido de frenos es fundamental para el buen desempeño del sistema, por lo que si este falta, puede ocasionar que tu vehículo pierda potencia de freno.
- Pastillas desgastadas: Las pastillas están en constante roce con el disco al momento de frenar, por lo que, al cabo de un tiempo, es normal que sufran un desgaste.
- Discos sucios o desgastados: Al igual que en caso de las pastillas, los discos se desgastan o se ensucian con el paso del tiempo, mermando la capacidad de frenado.
- Amortiguadores malos: Aunque no lo creas, también los amortiguadores pueden tener culpa al momento de frenar, pues si estos se encuentran en mal estado, la rueda rebotará ocasionando que no se tenga el mejor contacto con el pavimento.



